14 de agosto de 2022

Paola 11

Entre tanto, te miro. Y tus ojos, siempre atentos; tu sonrisa, siempre tímida; y ese hoyuelo, que me destroza, soslayan el trasiego que en mi habita. Y el tiempo dicta impertérrito. Parece que incluso mañana fue ayer. 

Y, entonces, llegas. Y ahí vas, rubia mía, pasando de puntillas por cada momento que la vida te plantea, como una hada que, apenas posada en cualquier rincón inhóspito, deja su esencia y reverdece el inhabitado espacio que le rodea. Esa virtud de llenar el vacío de tu derredor. Tuya es, hija mía, no la pierdas.


Y yo, inevitablemente, te miro. Y mis ojos, porque así mi corazón lo ordena, repiten "tequiero" para siempre.




¡Feliz cumpleaños, hija mía! Que no te roce ni el aire....

Domingo 14 de agosto de 2022

1 de agosto de 2022

Martín 8.

Ahí es donde realmente me matas, vida. Ocho años ya, entre la algarabía y el alboroto de todo lo que te rodea. La vida parece ir con prisas, a juego contigo, mi torbellino imparable, indetenible, mi mediano incompatible con el reposo. Todo, a todo lo que das. En ti no existe la mesura. 




Y que nunca exista, hijo mío. Quizás, por eso amas tan bien. Quieres tanto. Solo un pecho puro como el tuyo puede desprender tanto cariño, puede albergar tanta nobleza.
 
Sigue ahí siempre, con tus brazos abiertos, con tu cabeza esperando apoyarla en mi pecho. Yo seguiré siempre aquí, con mi pecho esperándote, henchido de orgullo. Yo seguiré siempre aquí, hijo mío, dispuesto a aprender a abrazarte como tú me enseñas.

Te quiero tanto.
Lunes 1 de agosto de 2022