25 de junio de 2021

25 de junio. Confieso

Confieso que aún lloro. Y que lo hago a solas. Que cojo mi intimidad y me alejo, con el único propósito de celebrar mi momento sin interferencias, de conectar y purificarme, de recargarme saboreando tu recuerdo. Y que me gusta pensar que ese momento no es mío, que es nuestro. Confieso, también, que sentir así me recoloca, por si alguna vez tuve, tengo o tuviese la impropia tentación de errar el sentido de alguno de mis pasos. Peligroso camino que pudiese desviarme de lo auténtico. Confieso, casi convencido, casi intentando convencerme, que hoy, 11 años después, el día de tu no cumpleaños, enano, no imagino un mundo diferente al de ahora, no me castigo con lo que no ha sido. Confieso que estoy a punto de conseguir poner por delante la felicidad de lo vivido y dejar al fondo la tristeza de lo robado.

Hoy volveremos a no cantar cumpleaños feliz por undécima vez. Pero volveremos a recordar que tu amor creó una preciosa familia que transita feliz sin dejar de pensar en ti ni un solo día. 

Y confieso, sobre todo, ante todo, que lo que más me gusta, que de lo que más orgulloso me siento es de escuchar tu nombre en los labios de tus hermanos, con ese matiz especial que solo ellos saben darle. Y ahí, henchido, quedo satisfecho.




Felicidades, enano.

Al amanecer el día,
cojo mi barca y me alejo.
Sin más faro ni más guía
que el sabor de tu recuerdo.
(Mi Pobre Vida. Hermanos Reyes)

Viernes 25 de junio de 2021